viernes, 24 de febrero de 2012

Libros #60: Así los he visto.

José María de Arilza es uno de esos hombres que podríamos calificar de magnánimos, y no, no estoy exagerando ni un ápice, aunque bien es cierto -y no me duelen prendas en decirlo- que también entra dentro de esa categoría de individuos "arribistas" que bailan el agua a quien haga falta según sus conveniencias personales de cada momento, y quien sepa algo del personaje sabe perfectamente de lo que estoy hablando.
Hijo de la condesa de Rodas y de un prestigioso médico, estudió Ingeniería Industrial y Derecho y ya desde muy joven mostró amplias simpatías por la política, de hecho, participó en la fundación de las JONS (aunque más tarde su pensamiento político estaría diametralmente opuesto a lo que propugnabas éstas con Ramiro Ledesma a la cabeza), fue pieza clave en la fusión de La Falange de José Antonio con las mismas JONS que él ayudó a fundar y ocupó varios cargos promovidos por el "Movimiento Nacional" durante el franquismo como por ejemplo el ser miembro del primer consejo de FET de las JONS una vez fundidas todas las fuerzas que participaron en el Alzamiento Nacional tras el decreto de unificación del año 1937.
Aunque su época más importante, políticamente hablando, desde mi punto de vista fueron sus años de embajador en los diversos países donde ejerció como tal. Años duros para España, de aislamiento internacional y autarquía, años en los que Areilza se movía como pez en el agua, desde Argentina a Francia, pasando por Estados Unidos, con un patriotismo sin fisuras y siempre buscando lo mejor para ésa nuestra maltrecha España de los años 40 y 50, para posteriormente dimitir en los años 60 de su puesto de embajador en Francia por discrepancias con el régimen y pasar a formar parte del consejo privado de Don Juan de Borbón. Sirvan estas brevísimas pinceladas de su apasionante biografía para hacernos una idea de quién y porqué escribió "Así los he visto", magnífico libro y pieza fundamental para conocer con algo más de detalle lo que se movía en las "cloacas" de la política del ministerio de exteriores español tras la Guerra Civil Española.

Por el libro desfilan una veintena larga de personajes, desde el doctor Areilza (padre del autor), Miguel de Unamuno, Ramiro Ledesma Ramos, Onésimo y José Antonio, siguiendo con Eva y Juan Perón, Einsenhower, John Kennedy, De Gaulle y terminando con Don Juan de Borbón y el General Franco, personajes todos ellos que de alguna u otra manera tuvieron relación con el autor del libro.
Se pueden destacar dos partes claramente diferenciadas, atendiendo a las personalidades de las que nos va contando su opinión José María de Areilza.
Por un lado, su etapa política anterior a la Guerra Civil, y es en esta época donde tiene contacto con Rafael Sánchez Mazas, José Félix de Lequerica, Ramiro, José Antonio y Onésimo, Calvo Sotelo, Agustín de Foxá y otros, de los que se nos da buena cuenta en relatos interesantísimos y de donde si se sabe leer entre líneas se pueden conocer detalles apasionantes de cada uno de los personajes.
Y por otro, su etapa de apego al régimen de Franco, fundamentalmente como embajador en países de enjundia e interés político y económico para la política exterior de España de aquéllos años. Delante de nuestros ojos y negro sobre blanco se harán presentes -como si estuviésemos en medio de aquéllas conversaciones- Perón, Natalicio González, John Foster Dulles, Pierre Brisson y algunos más que harán las delicias de aquéllos para los que la Historia de España sea algo más que Historia.

En el libro no se nos cuentan secretos de Estado, máxime teniendo en cuenta que éste se editó en el año 1974, estando el régimen de Franco en clara decadencia y prácticamente agónica, pero en vigor al fin y al cabo y por tanto, pero sí hay, por ciertos guiños que nos brinda el autor, pasajes de alto valor histórico, y como decía antes, si se sabe leer entre líneas y se ve un poco más allá de lo que objetivamente parece que nos dice Areilza, el libro se hace más jugoso si cabe. El libro está de lleno de anécdotas, unas curiosas, otras no tanto y algunas que literalmente sobran ya que parece que están puestas por relleno más que por que suscite el más mínimo interés a alguien, pero he de decir que éstas son las menos.
Por todo lo anterior, he de decir que el libro es de obligada lectura para aquél que tenga cierto afán por conocer de primera mano, de la mano de alguien que ha estado codo con codo con personajes de la talla de los mencionados anteriormente, qué se cocía en la política "preguerracivilista" (permítaseme la expresión) y lo que es más importante, qué se cocían en los pasillos de las embajadas españolas de países clave como Argentina, Estados Unidos o Francia en los años 40, 50 y 60 del pasado siglo.

Si hay que ponerle alguna pega al libro, indicar que es una pena que no se hubiese escrito ocho o diez años más tarde (José María de Areilza murió en el año 1998), ya que podrían haber paseado también por sus páginas personajes clave en la transición española, época en la que también Areilza jugó un papel más que importante, tanto, que está considerado uno de los artífices de la Transición.

jueves, 9 de febrero de 2012

¡Cuánta estupidez!

Tras leer la noticia que a continuación reproduciré íntegramente, me pregunto hasta dónde, hasta qué límites, está dispuesto a llegar eso que algún "bienpensante" dio en llamar "políticamente correcto", ya que de verdad, no me digáis que lo que a continuación tenéis la oportunidad de leer no es una muestra más de la idiocia y la estulticia de alguien que con tal de hacerse notar, a falta de capacidad intelectual para llevar a cabo un estudio serio, sus entendederas no le han dado para más que para eso, para aseverar ni corto ni perezoso, y sin que se le caiga la puta cara de vergüenza que la sociedad en que vivían los Pitufos era una sociedad con tintes totalitarios, cercana a los postulados estalinistas o nazis...¡acojonante!, ¡lo que hay que leer!, e este ritmo, hasta "Rita la Cantaora" va a resultar ser Fascista, ¡y nosotros sin enterarnos!...
Sin ningún género de dudas, esta noticia y en particular el hacedor del estudio sociológico en que se basa la misma, hacen valer esa verdad ineludible que indica que nunca habrá falta de tontos en el mundo. No perdáis detalle y deleitaros con el siguiente artículo aparecido en eleconomista.es:


Papá Pitufo, ¿nazi y totalitario?

El escritor francés Antoine Buéno ha elaborado un estudio sociológico sobre la comunidad de los pitufos definiéndola como totalitaria con fuertes tintes estalinistas o nazis.

En su libro, 'El pequeño libro Azul', Buéno analiza de forma detallada la forma de vida de los personajes creados por Peyo en los años cincuenta. Según unas declaraciones recogidas por 20min, el autor piensa que la sociedad pitufa "es el arquetipo de una utopía totalitaria impregnada de estalinismo y nazismo".

Buéno basa sus conclusiones en el tipo deeconomía pitufa que tiene ciertos rasgos muy similares a los que pudieron verse en este tipo de totalitarismos, como que no exista la propiedad privada o que esté liderada por un ser, Papá pitufo, que se muestra totalitario y paternalista.

En cuanto a otros rasgos ha señalado el racismo, ya que al parecer no le gustan los negros y tienen como gran enemigo a Gargamel, un personaje cuyo origen es judío.

También ha tachado esta sociedad como machista, pues no hay mujeres, solo pitufina, que curiosamente presenta rasgos arios, prototipo ideal de los nazis.



sábado, 4 de febrero de 2012

Libros #59: Franco.

El libro del que voy a escribir hoy llegó a mis manos gracias a un muy buen amigo, que habiéndoselo encontrado junto a otros libros en un contenedor de reciclaje de papel y debido a su antifranquismo recalcitrante, no tuvo a bien que este libro, cuyo título es Franco, y por autor tiene a Juan Pablo Fusi, ocupara un preciado espacio en su biblioteca personal y se acordó de mí, ávido lector de todo tipo de negro sobre blanco y con especial interés por todo lo acontecido en la Historia y la Política española del siglo XX. Así que lo acepté, lo leí, lo clasifiqué en mi biblioteca y hoy no me queda más remedio que hacer una pequeña crítica del mismo ya que para eso creé la sección de libros en mi blog.

Juan Pablo Fusi, autor del libro como indicaba unas líneas más arriba, es doctor en Historia por la Universidad de Oxford y ha ejercido la docencia en Universidades de prestigio internacional, por tanto, ya se le supone cuando menos cierta solvencia en lo que a materia histórica se refiere. Ahora bien, ya se sabe que es difícil dejar la subjetividad a un lado cuando se tratan ciertos personajes o acontecimientos históricos, sobre todo cuando son relativamente recientes en el tiempo y algunas heridas que dichos personajes o dichos acontecimientos abrieron, aún no se han cerrado en una buena parte de la sociedad. No había leído anteriormente nada sobre este autor, es más, tuve que buscar alguna referencia suya antes de enfrentarme a la lectura del libro -me gusta saber quién ha escrito lo que voy a leer, más que nada por saber de antemano lo que me puedo encontrar con el paso de las páginas- y si algo tengo que dejar claro desde este mismo momento, es que Juan Pablo Fusi no es nada sospechoso de ser franquista, haberlo sido, o sentir algún tipo de afecto por el régimen que durante cuarenta años Franco dirigió con mano de hierro. Condición que no es óbice para que Fusi haya realizado un formidable trabajo de investigación y puesta en escena de la figura de Franco, un libro objetivo, como a mí me gustan, y lo que es más importante, como debe ser un libro sobre Franco y el franquismo.

Como se trata de un libro biográfico y suficientemente objetivo como decía antes, no tengo mucho que decir respecto al mismo, para mí es un libro más de los cientos que hay sobre Franco. Su etapa en África, la Guerra Civil y el auge y caída de su Régimen. Aunque sí me gustaría hacer un inciso y hacer notar que Fusi, nada sospechoso de Franquismo como he indicado anteriormente, considera que el régimen que promovió el General Franco fue autoritario y no totalitario. Esto es importante ya que es una batalla abierta con varios frentes en la que muy diversos historiadores andan imbuidos y no hay dios que los ponga de acuerdo, por tanto, Juan Pablo Fusi suma uno al bando de los que defienden que Franco fue autoritario, pero jamás totalitario, ni tan siquiera en los primeros años tras la victoria en la contienda que enfrentó fraticidamente a media España contra la otra media.
Para terminar la crítica, dejaré unos extractos tanto de prólogo, del también historiador Edward Malefakis, como del propio autor del ensayo, que reflejan a la perfección lo que se encontrará en el estudio el lector que esté interesado en leerlo:

"La dificultad final que se presenta al escribir acerca de Franco es separar entre la persona y el régimen...La tarea no es sencilla. Además de un concienzudo estudio, requiere objetividad, sensibilidad, imaginación y, quizá lo más importante, valentía...No cabe ninguna duda de que Juan Pablo Fusi posee todas esas cualidades...Quedará como una valiosa introducción a la carrera política del hombre que dominó España durante más tiempo que ningún otro"

(Del prólogo de Edward Malefakis)

"Este libro es más un ensayo biográfico que una biografía propiamente dicha...Pretende ser una síntesis apretada de la vida de Franco; de ninguna manera es, ni ha querido ser, un trabajo definitivo basado en una investigación exhaustiva...Escribir sobre Franco y el franquismo no es ni fácil ni grato. En este ensayo he tratado de evitar caer en una doble tentación: la tentación de sustituir la historia del franquismo por la historia de la oposición al mismo -confusión frecuente e inadmisible- y la tentación de reemplazar el análisis histórico por la expresión de opiniones... El historiador solo debe expresar en su trabajo sus conclusiones historiográficas (y no sus gustos personales o sus pasiones particulares)".

(De la advertencia inicial de Juan Pablo Fusi)