domingo, 30 de diciembre de 2007

Fin de año.

Para despedir el año voy a ser breve y no me extenderé mucho en el post de hoy. Tan sólo voy a hacer un pequeño comentario acerca de la tradición de celebrar la despedida de año, por qué comemos 12 uvas acompañando a las campanadas que dan origen al nuevo año y cómo se estableció la fecha 1 de enero para dar comienzo a un nuevo calendario.

Por todos es conocido que no todas las culturas están viviendo en el mismo año. Debido a motivos básicamente religiosos en su mayoría, cristianos, musulmanes, judíos, budistas, etc están viviendo en un "ahora" físicamente el mismo pero no cronológicamente hablando. Aunque para unificar criterios y que el mundo no fuese un galimatías de fechas, años, días y demás términos referentes al tiempo, el calendario aceptado internacionalmente es el que da por concluido el año el 31 de diciembre. Por poner un ejemplo, en todos los ordenadores y sistemas informáticos del mundo, aparece hoy "30 de diciembre de 2007", aunque dicho ordenador esté situado en Teherán que atendiendo a su cultura y tradición, es evidente que no es al año 2007 d.C. para los musulmanes.

El establecimiento de un calendario común a todo el mundo no fue tarea fácil y no estuvo exento de discusiones, diatribas y pensamientos a favor y en contra por parte de las diversas culturas. Hasta el siglo XVI, la mayor parte de países europeos se regían por el calendario juliano y el año terminaba el día 24 de marzo cuando se dejaba atrás el invierno tras el equinocio de primavera. Sin embargo, en el año 1582 entró en vigor el calendario gregoriano, por el cual estamos regidos actualmente y es de este calendario que finalice el año el día 31 de diciembre.

La tradicional fiesta de nochebuena se viene celebrando en el ámbito de países cristianos desde hace muchísimos siglos, una fiesta en la que supuestametne se celebra el nacimiento de Jesús de Nazaret. Sin embargo la celebración de nochevieja es algo relativamente moderno, ya que data de comienzos del siglo XX cuando la gente empezó a salir a la calle a celebrar la llegada del año nuevo. ¿Y las 12 uvas?. Pues el origen exacto de la tradición de comerse 12 uvas a las 00:00 horas del día 1 de enero no se sabe con exactitud, pero la teoría con más aceptación es la que cuenta que a principios del siglo XX se produjo un enorme excedente de uvas en Alicante y para promocionar dicho fruto, así como deshacerse de parte de ese excedente, repartieron uvas a las doce de la noche del día 31 de diciembre para que la gente comiese doce uvas haciéndolo coincidir con las doce campanadas.